Cuando yo era sólo yo

No hace mucho, yo era sólo yo.
¡Qué tiempos aquellos! Os engañaría si no os dijera que a veces me siento nostálgica, pero la verdad es que ahora soy mucho más feliz y lo mejor de todo es que resulta bastante más sencillo serlo.
Como buena hija única, antes yo era el centro de todo mi mundo. Una chica extrovertida, impulsiva, espontánea (quizás demasiado), sincera (eso también quizás demasiado), y como dicen algunos «un poco loca» (yo creo que se refieren a distinta, pero como ellos son más «normales» mis diferencias las interpretan como un punto de locura, ¡qué suerte tengo entonces de no estar cuerda!)

Total que un buen día, cuando yo era sólo yo y «estaba un poco loca», me topé con Francis (ahora mi marido). No sé si fue Francis quien puso mi mundo patas arriba o bien fue el tiempo o, quién sabe, quizás una combinación de ambas, pero desde entonces mi realidad empezó a cambiar y también lo hice yo. Sigo siendo esa chica extrovertida, impulsiva, espontánea, sincera y distinta, pero ahora soy mucho más feliz y lo mejor de todo es que resulta bastante más sencillo serlo.
¡Buenas noches inquietos!